Dicho gasto también fue destinado a actualizar máquinas de escribir
Estos gastos fueron autorizados por la Dirección General de Recursos Materiales y Servicios, a cargo de Aboytes Montoya Jesús Manuel
En la Cámara de Diputados se gastaron más de 300 mil pesos sólo en actualizar relojes checadores y máquinas de escribir, de acuerdo a los dos últimos servicios publicados en su página oficial.
Los dos últimos registros dados a conocer son de hace casi siete meses, los cuales fueron dados al mismo proveedor: Luna Moreno Gustavo bajo el mismo Número de Orden de Servicio 52280, los cuales tenían fecha de aplicación a partir del 5 de febrero hasta el 31 de diciembre de 2016, con fecha límite para el 1 de enero de 2017. En la descripción de dicho gasto señalan que ese dinero fue para el “Mantenimiento prevenrivo (sic), correctivo y refacciones para los relojes receptores de documentos”. Para ello destinaron 219 mil 210 pesos con 71 centavos.
Los dos últimos registros dados a conocer son de hace casi siete meses, los cuales fueron dados al mismo proveedor: Luna Moreno Gustavo bajo el mismo Número de Orden de Servicio 52280, los cuales tenían fecha de aplicación a partir del 5 de febrero hasta el 31 de diciembre de 2016, con fecha límite para el 1 de enero de 2017. En la descripción de dicho gasto señalan que ese dinero fue para el “Mantenimiento prevenrivo (sic), correctivo y refacciones para los relojes receptores de documentos”. Para ello destinaron 219 mil 210 pesos con 71 centavos.
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Más de 80 mil pesos para darle mantenimiento a máquinas de escribir
Otro de los gastos fue para el “Mantenimiento preventivo y correctivo para las máquinas de escribir electrónicas, eléctricas, mecánicas, sumadoras y calculadoras”, en donde gastaron 87 mil 684 pesos con 30 centavos, que sumado al presupuesto anterior suma 306 mil 894 pesos.
Ambos gastos fueron autorizados por la Dirección General de Recursos Materiales y Servicios, a cargo de Aboytes Montoya Jesús Manuel, mimo que aprobó los 91 millones de pesos que la Cámara de Diputados gastó en drones y cámaras de seguridad de alta definición o los 895 millones de pesos, que de la mano del diputado perredista Jesús Zambrano destinaron para la contratación de obras, que terminaron ejecutando amigos del mismo perredista, entonces presidente de dicha cámara.
Entre las funciones de dicha dirección está el entregar a los órganos legislativos y áreas administrativas de la cámara “en forma eficiente y oportuna, los recursos materiales y los servicios generales que requieran para el buen desempeño de las actividades que tienen encomendadas”.
Ambos gastos fueron autorizados por la Dirección General de Recursos Materiales y Servicios, a cargo de Aboytes Montoya Jesús Manuel, mimo que aprobó los 91 millones de pesos que la Cámara de Diputados gastó en drones y cámaras de seguridad de alta definición o los 895 millones de pesos, que de la mano del diputado perredista Jesús Zambrano destinaron para la contratación de obras, que terminaron ejecutando amigos del mismo perredista, entonces presidente de dicha cámara.
Entre las funciones de dicha dirección está el entregar a los órganos legislativos y áreas administrativas de la cámara “en forma eficiente y oportuna, los recursos materiales y los servicios generales que requieran para el buen desempeño de las actividades que tienen encomendadas”.
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Y la austeridad que no llega
Vale la pena recordar que estos gastos se dan a pesar de que en enero pasado se comprometieron a ser más austeros en sus gastos, sin embargo, hace 20 días, el 4 de julio, le pidieron a la Secretaría de Hacienda otros 80 millones de pesos adicionales al presupuesto aprobado para este año, pese a que ya contaban con 7 mil 629 millones de pesos.
Esto, de acuerdo con el diario Reforma, fue aprobado por el Comité de Administración con el aval de todos los grupos parlamentarios, para que las áreas administrativas hicieran las gestiones necesarias para solicitar dicha cantidad de las Previsiones Económicas del Ramo 23, mismo que es administrado por la propia Secretaría de Hacienda. Otra de las cosas que contrasta con dichos gastos está en que los relojes checadores apenas son utilizados seis meses al año, donde en algunos periodos incluso sólo trabajan un día a la semana.
Tal como ya se publicó en Mientras tanto en México, los diputados y senadores del Congreso de la Unión solamente trabajan seis meses y medio gracias a que así lo establece la misma ley, por lo que sesionen en 195 días y otros 170 están en receso. Por dicho trabajo ganan casi 150 mil pesos cada mes, entre dieta y compensaciones, lo cual al año de un millón 800 mil pesos, según lo publicado por el periódico El Universal.
Esto, de acuerdo con el diario Reforma, fue aprobado por el Comité de Administración con el aval de todos los grupos parlamentarios, para que las áreas administrativas hicieran las gestiones necesarias para solicitar dicha cantidad de las Previsiones Económicas del Ramo 23, mismo que es administrado por la propia Secretaría de Hacienda. Otra de las cosas que contrasta con dichos gastos está en que los relojes checadores apenas son utilizados seis meses al año, donde en algunos periodos incluso sólo trabajan un día a la semana.
Tal como ya se publicó en Mientras tanto en México, los diputados y senadores del Congreso de la Unión solamente trabajan seis meses y medio gracias a que así lo establece la misma ley, por lo que sesionen en 195 días y otros 170 están en receso. Por dicho trabajo ganan casi 150 mil pesos cada mes, entre dieta y compensaciones, lo cual al año de un millón 800 mil pesos, según lo publicado por el periódico El Universal.
Con información de eluniversal.com.mx
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